Por qué tenemos cosquillas

Aunque normalmente lo asociamos con algo cuando menos divertido, las cosquillas son realmente una reacción de nuestro cuerpo para protegerse ante un estímulo externo. Por ejemplo cuando un insecto camina por nuestra piel, cuando una partícula que nos causa alergias o molestias se acerca a nosotros, etc, los receptores de la piel mandan la señal a nuestro cerebro que se convierte en un cosquilleo y nos hace saber que algo pasa

El hombre no es el único en sentir las cosquillas, los primates, por ejemplo, también pueden experimentarlas lo que hace pensar a los científicos que ésta reacción se debe a un instinto que nos ha acompañado por millones de años

Claro que en la mayor parte de los casos las cosquillas vienen gracias al estímulo dado por una persona cercana, por lo que se convierten en un juego y en algo agradable, dado que no representan un peligro para nuestra seguridad

Las cosquillas requieren de una proximidad tan importante que cuando vienen de manos de alguien a quien queremos, inmediatamente nuestro cerebro las asume como algo positivo, en cambio si implican el acercamiento de un extraño las podemos ver como una amenaza, un respuesta instintiva que hemos desarrollado durante la evolución

¿Y por qué nos hacen reír y agitarnos?. Con las cosquillas los receptores de la piel mandan señales a dos regiones del cerebro que son las encargadas de procesar el tacto y las sensaciones agradables, la respuesta a ello son los movimientos agitados y aveces bruscos y la risa o los gritos de emoción y placer

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