Las enfermedades mentales más comunes -1 de cada 3 personas las sufre

El trastorno de ansiedad no es una única enfermedad, sino que es el nombre general bajo el que agrupamos una gran cantidad de trastornos distintos. A continuación te explicamos cuáles son los grupos de trastornos más frecuentes dentro de los trastornos de ansiedad:

Fobias

El término fobia a menudo se utiliza demasiado a la ligera. Una cosa es sentir miedo, pero la fobia es un miedo excesivo, médicamente diagnosticable. Hay gente a la que no le gustan las arañas o las serpientes, que sienten miedo cuando se encuentran con un animal de este tipo. Sin embargo, la gente que sufre, por ejemplo, de aracnofobia, sienten un gran miedo, irracional, que les controla y del cual no pueden escapar.

Al final estas fobias, si pueden encontrar el estímulo en su día a día, acaba por cambiar sus hábitos interfiriendo en su desarrollo cotidiano. Entre estos estímulos que desencadenan fobias, los más frecuentes son conducir un vehículo, volar en avión, visitar al dentista o ver sangre.

Pero no solo con objetos, la fobia también se puede dar ente situaciones o lugares, aquí los dos más habituales:

• La fobia social es un tipo de trastorno de ansiedad que es bastante común. A menudo se confunde con la timidez, cuando no tiene nada que ver, la persona que sufre este tipo de trastorno siente un miedo incontrolable ante el hecho de tener que interaccionar con otras personas, causándole una gran ansiedad ante la idea de ser juzgado, ser criticado, humillado, etcétera. En consecuencia es incapaz de hablar en público, conocer gente nueva o ir a reuniones sociales a menos que sepas cómo tratar la fobia social.
• La agorafobia se acostumbra a definir como el miedo a los espacios abiertos, como parques o calles. Sin embargo, esta definición no es del todo acertada, pues a lo que realmente tiene miedo esta gente es a tener una crisis de ansiedad en uno de estos lugares, donde no pueden recibir ayuda o van a ser el centro de atención.

Estrés Postraumático

El TEPT, siglas de Trastorno por Estrés Postraumático aparece después de que una persona haya vivido alguna experiencia psicológicamente chocante. El Trastorno por Estrés suele aparecer en personas que han vivido un accidente, un secuestro, muertes cercanas de modo violento, por lo que no es de extrañar que también se le llame la enfermedad del soldado, pues es muy común que la padezcan los veteranos de guerra. Sus síntomas son las pesadillas, ataques de ira, sensación de soledad y el sentimiento de que el hecho traumático va a repetirse.

Trastorno Obsesivo-Compulsivo

El Trastorno Obsesivo-Compulsivo, también conocido como TOC es de los trastornos de ansiedad que más afectan al desarrollo diario de las personas. Las personas con TOC sufren pensamientos, imágenes e ideas intrusivas que causan sensación de malestar y les obligan a realizar ciertos movimientos o rituales compulsivamente. Algo muy común en los paciente con TOC es la realización de un número concreto de repeticiones en cada acto; por ejemplo, abrir la puerta 4 veces, levantarse y sentarse 4 veces, etcétera.

Trastorno de Ansiedad Generalizada

De todos los trastornos comentados hasta ahora, seguramente este es el más extendido, de hecho es el que popularmente se conoce como ansiedad. Es normal que nos preocupemos por las cosas, pero la ansiedad se diagnostica cuando esta preocupación se vuelve irracional e interfiere en la vida normal de la persona, sufriendo por todo y sintiendo miedo.

Uno de los síntomas de la ansiedad es la preocupación crónica, ya sea por el trabajo, familia, pareja, que se manifiesta a nivel físico con mareos, insomnio, dolor de pecho, dificultad para respirar o cansancio.

Los trastornos del estado de ánimo, también llamados trastornos afectivos, son un tipo de enfermedades mentales que alteran el estado de ánimo del paciente, cambiando sus actitudes y su forma de ver su vida y el mundo que les rodea. Los dos más comunes son:

Trastorno de bipolaridad

El trastorno de bipolaridad afecta a la persona cambiando bruscamente sus estados de ánimo, pasando de la depresión a un estado maníaco en poco tiempo. No hay que entender al bipolar como una persona inestable emocionalmente, los ciclos de la enfermedad pueden durar de días a meses, entre los que la persona puede pasar de sentirse lleno de energía durmiendo apenas 2 horas a no moverse de la cama.

Sin medicación y tratamiento médico es muy difícil mantener a ralla la enfermedad, aunque no todos quien lo sufren lo hacen al mismo nivel. Con la medicación correcta se pueden prevenir los brotes maníacos y ayudar al paciente en sus etapas de depresión. En el siguiente artículo te explicamos cómo saber si soy bipolar.

Trastorno por depresión

Este es otro de los nombres que utilizamos demasiado a la ligera, cuando realmente se trata de una de las enfermedades mentales más graves. La depresión no es simplemente sentirse triste por haber suspendido un examen o por estar decepcionado. Las personas con depresión, que puede durar años, lo viven como una incapacidad en su día a día que les debilita y afecta a su modo de pensar y actuar. ¿Cómo saber si tengo depresión? En el siguiente artículo de unCOMO te lo explicamos.

En los últimos años este tipo de enfermedades psíquicas han ido en aumento, los cánones de belleza excesivos cultivados por la publicidad y la industria de la moda ha provocado que los adolescentes busquen parecerse a unos cuerpos que no están a su alcance, sumiéndolos en un espiral autodestructivo:

Anorexia Nerviosa

La base de la anorexia es la obsesión por controlar todas y cada una de las cosas que se come. Lo que realmente sufren es una distorsión en la percepción de su imagen corporal, por lo que nunca se ven delgados, razón por la cual siguen restringiendo sus comidas, haciendo dieta o practicando intenso ejercicio físico. A pesar de que comen muy poco, cuando lo hacen sienten malestar y remordimientos.

Bulimia Nerviosa

Este también es un trastorno alimentario, pero la diferencia entre la anorexia y la bulimia es que mientras los primeros restringen al máximo la ingesta de alimentos, los paciente bulímicos tienen una pauta de alimentación cambiantes. Pasan por etapas en las que necesitan una gran ingesta de alimentos calóricos -que se conoce como periodo de atracón- para después, victimas del remordimiento y la tristeza busquen eliminar esas calorías que han ingerido mediante el vómito o el consumo de laxantes.

Los trastornos psicóticos son las enfermedades mentales, pues las personas que las sufren pueden llegar a perder totalmente el contacto con la realidad. Entre sus síntomas más destacados encontramos:

• Delirios: falsas creencias o percepciones equivocadas, como tener la sensación de que alguien les está siguiendo.
• Alucinaciones: percepciones y sensaciones falsas, ver, oír o escuchar algo que realmente no existe. La diferencia entre ambas es que mientras los delirios parten de una base real que es distorsionada por la mente, las alucinaciones no parten de ningún objeto presente y son totalmente fruto de la mente.

Los tipos de psicosis más comunes son los siguientes:

Trastorno delirante

El trastorno delirante, también conocido como paranoia, es un trastorno psicótico en el que la persona tiene una o varias ideas delirantes que rigen su vida. Estas personas están totalmente convencidas de que son reales cosas que no existen, adaptando el mundo a esa paranoia. Frecuentemente, los trastornos delirantes se manifiestan haciendo creer a la persona que alguien le persigue o que está siendo víctima de un complot.

Esquizofrenia

La esquizofrenia es de las enfermedades mentales más graves y conocidas. Se caracteriza por las alucinaciones y los pensamientos perturbadores que la persona sufre, algo que la acaba aislando de cualquier actividad social. De momento no podemos decir que tengamos la cura contra la esquizofrenia, no obstante si que hay tratamientos efectivos que, tomados correctamente ayudan a que los pacientes puedan vivir su vida con normalidad y sin alucinaciones.

Dentro de este grupo encontramos aquellas enfermedades psíquicas que marcan un patrón de comportamiento en la persona que le provoca problemas para relacionarse con la gente y su entorno. Su inicio se marca en la adolescencia y las dos más habituales son:

• Trastorno límite de la personalidad: quienes lo sufren tienen una personalidad muy cambiante causada por el desconocimiento de quien son y la debilidad que siente. Sus valores e intereses cambian con mucha rapidez, pues solo son capaces de ver las cosas de un modo extremo. Tan rápido pasan a idolatrar a una persona como a verla como un ser totalmente despreciable. Esta es la razón por la cual sus relaciones son tan intensas como inestables, pues suelen idealizar a sus parejas y luego ningunearlas.

• Trastorno antisocial: es lo que a menudo, y erróneamente, se conoce como psicopatía. La principal característica es su tendencia para no relacionarse, intentando evitar cualquier tipo de contacto con la sociedad. Sus conductas suelen ser violentas y agresivas, pues realmente no sienten ningún tipo de apego por la gente. No obstante, tienden a ser tímidos y depresivos, con altos niveles de ansiedad social. La terapia psicológica se ha demostrado como el modo más efectivo para tratar este tipo de trastornos.

Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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