En la antigua China, el té era considerado como un elixir mágico, tanto así que se le atribuían propiedades increíbles, como facilitar el sueño, quitar la sed, animar el corazón y cubrir todas las necesidades básicas de la vida. Además de los tradicionalmente conocidos aportes de esta infusión, el té presenta una gran cantidad de beneficios a la salud de quien acostumbra beberlo, pero una de las principales preguntas que giran en torno a la órbita de estas bondades y propiedades es: ¿El té sube la tensión arterial? Si tú también quieres conocer las respuesta a esta pregunta, te invitamos a continuar leyendo el siguiente artículo de unComo.com para descubrirlo con todo detalle.
¿Qué es el té?
El té es una popular infusión originaria de China que se prepara utilizando las hojas de un arbusto conocido como Camellia sinensis. Todas las variedades de tés conocidas provienen de esta misma planta, diferenciándose cada una de ellas por el método de preparación utilizado, variando entre procesos como fermentación, vaporización, entre otros.
Los principales beneficios aportados por el té se atribuyen a unas sustancias conocidas como flavonoides, las cuales actúan como antioxidantes en el cuerpo, neutralizando los efectos negativos de los radicales libres, los cuales son moléculas que causan daños en las células del cuerpo, provocando en los casos más leves envejecimiento y en los peores casos, enfermedades como cáncer.
Otros componentes beneficiosos que se encuentran en el té son: minerales alcalinos, vitaminas B1, B12, K y A, además en una proporción menor contiene cafeína, la cual produce un efecto estimulante pero sin alcanzar la excitación que se podría obtener bebiendo café.
El té y la hipertensión
Para dar respuesta a la pregunta de si el té sube la presión arterial, es importante señalar que el té al ser un potenciador de la salud cardiovascular, es un excelente complemento para quienes padecen de presión arterial e inflamaciones. Según un estudio publicado por la British Journal of Nutrition, se demostró mediante una prueba aleatoria que el consumo de té a largo plazo mejora significativamente la tensión arterial. En personas de la tercera edad, el consumo de té previene los mareos causados al ponerse de pie, síntomas de la hipotensión ortostática.
El té regula la tensión, reduciendo el riesgo de derrame cerebral y si bien aún no se ha determinado cuál es la cantidad exacta de consumo de té que se necesita para recibir estos beneficios, varios estudios han demostrado que el consumo ideal debe estar entre 3 y 4 tazas de té diarias. Quienes tienen la costumbre de consumir té en las cantidades mencionadas (3 a 4 tazas) han reducido el riesgo de tener enfermedades cardiovasculares, ya que su consumo relaja los vasos sanguíneos y protege contra la formación de coágulos sanguíneos.
Ahora bien, el té no sube la tensión arterial si se toma en las cantidades adecuadas, y es que cada tipo de té contiene una cantidad de cafeína diferente, por lo que el consumo en exceso de cualquiera de estas infusiones puede traer serios problemas cardiovasculares, elevando la tensión arterial o causando arritmias cardíacas. Aparte de los daños asociados a condiciones cardíacas o elevar la tensión arterial, beber tés en exceso también acarrea otra serie de problemas, él té verde, por ejemplo, consumido en grandes cantidades puede causar úlceras en el estómago, trastornos digestivos o intoxicar el hígado.
El té negro, blanco, rojo o incluso el té verde, si se consumen en exceso, aparte de causar efectos negativos sobre la tensión arterial, también se advierte de contraindicaciones si se están tomando medicamentos para combatir la presión arterial, lo que podría provocar efectos adversos en la regulación de dicho padecimiento.
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Beneficios del té para la salud
Es importante destacar que si bien el té es popularmente conocido por brindar una gran cantidad de beneficios, muchos de estos no han sido comprobados científicamente, sino que se conocen por la experiencia y miles de años de consumo de esta infusión.
La mayoría de las propiedades adjudicadas al té son características de cualquiera de los diferentes tipos (verde, negro, rojo, blanco, oolong), pero dado los diferentes procesos de preparación, muchas de sus propiedades activas se pierden, dando al té verde las mayores propiedades terapéuticas gracias a ser el menos fermentado. A continuación, detallamos cuáles son los beneficios del té para la salud:
- Consumir una taza de té al día contribuye a minimizar los riesgos de sufrir ataques cardíacos, protegiendo los vasos sanguíneos al reducir la posibilidad de que las arterias se endurezcan, causando arteriosclerosis.
- Esta infusión es una bebida caracterizada por ser baja en calorías, lo que la hace ideal para consumir cuando optamos por seguir una dieta saludable, causando una sensación de saciedad y manteniéndonos hidratados.
- El té es un poderoso diurético, el cual ayuda a disminuir la retención de líquidos, eliminando toxinas del organismo por medio de la orina y favoreciendo la salud gastrointestinal.
- Es un excelente astringente, que ayuda a desinflamar la mucosa intestinal gracias a la presencia de taninos que le dan su característico sabor amargo, siendo un remedio muy eficaz contra la diarrea y la gastritis.
- Tal como hemos comentado, el té cuenta con una leve cantidad de cafeína, la cual ayuda a mantener el cerebro en estado de alerta sin provocar ese característico estado de excitación. Mediante un estudio reciente, se ha demostrado que aquellas bebidas que contienen cafeína en alguna medida son excelentes para disminuir las posibilidades de contraer Parkinson, por lo que consumir té colabora directamente con la prevención de sufrir esta enfermedad.
- Gracias a su efecto antioxidante combate los radicales libres, retrasando el envejecimiento celular y combatiendo la degeneración de las células que provocan la formación de tumores.
¿Cómo preparar un buen té?
La mejor manera de tomar el té, aprovechando sus beneficios de forma eficiente, es añadiendo agua hirviendo en una tetera en la que previamente hayamos preparado el té dentro. Luego, dejamos reposar la infusión entre 3 a 4 minutos y ya estará lista para consumir. Si se deja reposar por más tiempo, se corre el riesgo de que el té se vuelva amargo o que muchas de las sustancias activas se destruyan.
Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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- Conocer los niveles de cafeína de cada tipo de té es importante si padeces de alguna dolencia que pueda ser vista afectada por esta sustancia. La cantidad de cafeína que podemos encontrar en cada té es: té verde entre 8 a 36 mg, té oolong entre 12 a 55 mg, té negro entre 25 a 110 mg, té blanco entre 6 a 25 mg.