El cáncer de pulmón es una de las formas más comunes de cáncer, siendo el tabaquismo el principal detonante de esta enfermedad en cerca del 71% de los casos, según cifras de la Organización Mundial de la Salud. Aquellas personas que fuman, que están expuestas a carcinógenos como el amianto o el arsénico, a determinados minerales nocivos o que cuentan con casos de cáncer de pulmón en familiares directos, son más propensos a padecer esta enfermedad. Si formas parte del grupo de riesgo es importante realizar algunos cambios en tus hábitos y conocer cuáles son los primeros síntomas del cáncer de pulmón, para acudir a un especialista en caso de que sospeches de sus presencia.
El cáncer de pulmón es frecuente tanto en hombres como en mujeres, siendo los fumadores pasivos y activos quienes cuentan con mayor riesgo de padecerlo. Existen diversos tipos de cáncer de pulmón determinados según el tipo de células que se encuentran en ellos y el origen de la enfermedad, así puede presentarse:
- Cáncer de pulmón en células no pequeñas: engloba tres tipos de cáncer los adenocarcinomas, los carcinomas escamocelulares, los carcinomas de células grandes. Es el tipo más común, se presenta en personas que han fumado, en fumadores pasivos o en quienes han estado expuestos a ciertos químicos y gases.
- Cáncer de pulmón en células pequeñas: engloba dos tipos el carcinoma de células pequeñas y el carcinoma combinado de células pequeñas. Es menos frecuente que el anterior presentándose en cerca del 20% de los casos y se presenta mayormente en fumadores activos o que fumaron en el pasado.
El cáncer puede estar compuesto por ambos, de ser así se le conoce como cáncer mixto de células grandes y células pequeñas. Si la enfermedad ha comenzado en otro lado y se diseminó al pulmón se le denomina cáncer metastásico al pulmón.
Dependiendo del tipo de cáncer de pulmón con el que se cuente los síntomas pueden variar, sin embargo en la mayor parte de los casos los pacientes presentan señales determinadas, una de las más habituales es el dolor en el tórax que no se alivia.
La tos frecuente que no encuentra alivio con la medicación común es también un síntoma recurrente en el cáncer de garganta, a la que hay que prestarle atención si se forma parte de la población en riesgo: fumadores pasivos y activos, personas expuestas a químicos o gases carcinógenos, personas con antecedentes familiares de cáncer de pulmón importantes.
En algunas ocasiones la tos puede presentarse con sangre.
Las dificultades para respirar y la respiración con silbidos son comunes en pacientes con cáncer de pulmón. Suelen venir acompañadas de los otros síntomas propios de esta enfermedad.
La pérdida de peso involuntaria y sin razón aparente: no ha existido un cambio importante en la dieta, ni un incremento de la actividad física, así como el cansancio y la fatiga frecuente, son otros de los síntomas del cáncer de pulmón.
Una vez que el cáncer ha avanzado pueden presentarse otros síntomas como dolor frecuente en los oídos, cambios en la voz o ronquera, parálisis facial, párpado caído, problemas para tragar la comida e inflamación en el rostro o los brazos.
Es importante comprender que los primeros síntomas de cáncer de pulmón pueden corresponder también con un gran número de enfermedades, entre ellas la neumonía. Si presentas estas señales y te encuentras dentro del grupo de riesgo a padecer cáncer de pulmón, es conveniente que visites a tu médico para una revisión exhaustiva.
Si nunca has presentado estos síntomas pero eres fumador pasivo o activo, o estás en contacto cotidiano con sustancias carcinógenas, se recomienda realizar un chequeo anual exhaustivo para descartar la presencia de esta enfermedad.
Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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