Usar una báscula para saber tu peso no es tan sencillo como parece. Algunas personas pecan de subirse a la báscula muy a menudo y sin un horario determinado. Para que pesarte no sea un infierno, en unComo te enseñamos cómo usar una báscula de manera correcta. Con estos sencillos pasos aprenderás a utilizar adecuadamente tu báscula.
Mídete antes de pesarte. Es fundamental saber cuánto mides para conocer tu peso ideal.
Súbete a la báscula semanalmente. Lo ideal es hacerlo entre una y tres veces por semana. Olvídate de hacerlo a diario, pues tu peso puede variar durante el día a causa de la retención de líquidos o las comidas. Recuerda, además, que la báscula debe estar colocada en una superficie plana y dura.
Haz un gráfico para controlar tu peso y tu progreso. Puedes hacerlo a modo de tabla, colocando la fecha, la hora y el peso.
Busca una buena báscula. Gracias a las nuevas tecnologías tenemos a mano las básculas digitales. Estas son más precisas, puesto que miden la grasa corporal. Recuerda usar siempre la misma, pues cada báscula tiene márgenes de error diferente y los resultados pueden variar notablemente.
Revisa su precisión. Para que el error de calibraje sea mínimo, puedes controlar la precisión de tu báscula poniendo encima una paquete de azúcar, sal o harina. Como ya sabes cuánto pesa el paquete, controlarás cuál es el margen de error de tu báscula.
Pésate a primera hora. Antes de ingerir ningún alimento y hazlo siempre a la misma hora. Recuerda: los líquidos se pierden durante la noche. Así que por la mañana pesarás menos. Además, es aconsejable vaciar la vejiga antes de pesarte.
Pésate sin ropa o bien con el mismo conjunto siempre. Piensa que depende del tipo de ropa que lleves el peso puede variar notablemente.
Antes de establecer un peso semanal es recomendable que sigas una dieta particular y que no promedies el peso la primera vez que te pesas. Por ello es importante el uso del gráfico, con el que controlarás realmente lo que has perdido en función de la dieta y el deporte que hayas realizado de manera regular.
Planea rutinas. No te obsesiones con la pérdida de peso, pero tampoco pienses que bajarás de un día para otro. Lo ideal es planificarse actividades y ejercicios. Recuerda que los primeros días bajarás de peso muy rápido, lo importante es evitar subir y bajar con frecuencia.
Intenta mantenerte siempre en tu peso ideal. Come sano y lleva una vida equilibrada.
Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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