El retardo mental implica varias cosas, no solo es un funcionamiento intelectual que se encuentra por debajo del promedio. El niño que tiene retardo mental también presenta un déficit significativo de la capacidad adaptativa, como por ejemplo, en la comunicación, cuidado de sí mismos, habilidad académica, habilidad social, etc.
Pero más allá de las deficiencias, éstos niños tienen muchas riquezas. Aprender a desarrollar y estimular las capacidades de nuestros hijos es un paso muy importante que fomentará su desarrollo personal. A continuación, en unCOMO te presentaremos cómo saber si mi hijo tiene retraso mental.
Características del retraso mental
Cuando tenemos un hijo, las primeras preocupaciones giran en torno a su salud, sobre si se estará desarrollando bien, si tiene una correcta estatura, si su peso es el adecuado, etcétera. Sin embargo, a partir del momento en que nace hasta que llega a los 5 años, el niño también tiene que desarrollarse en otros parámetros, que se verán reflejados en la forma como actúa, como juega, como aprende y como se expresa.
Si tu hijo tiene dificultades en cualquiera de estas áreas, si no logra aprender ciertas acciones en el tiempo adecuado, como por ejemplo sonreír, mover la mano para saludar o dar los primeros pasos, puede ser que sufra algún problema de desarrollo o retraso mental.
Si quieres saber cómo identificar si tu hijo tiene retraso mental deberás estar atento a algunos de estos parámetros, comparándolos con los niños de su edad, para identificar el problema a tiempo y poder brindarle la ayuda necesaria para que logre desarrollar al mázimo todas sus potencialidades.
Síntomas de retraso mental leve en bebés
Una de las claves para saber si tu hijo tiene retraso mental es si tarda en gatear, sentarse o caminar en relación con el resto de niños de su edad. Un buen gateo es uno de los puntos más importantes en el desarrollo del bebé ya que estimula el uso de los dos hemisferios cerebrales, mejora sus conexiones y aprende a coordinar su cuerpo con su visión.
Si tarda ostensiblemente en emprender la movilidad por si solo puede ser a causa de un retraso mental, no obstante, no significa que cualquier niño que tarde en gatear lo sufra, hay muchas más causas, como podrían ser la físicas, que le impiden seguir el ritmo normal de desarrollo.
Retraso mental en niños de 3 a 6 años
Todos los niños deberían seguir una mismas pautas de desarrollo. A medida que van creciendo van aprendiendo diferentes habilidades que les sirven como trampolín para aprender otras habilidades de más dificultad.
Si ya le ha costado dominar el gateo es muy probable que le cueste empezar a hablar, y es precisamente esta una de las características que nos pueden servir para identificar el retraso mental. Estos niños tienen dificultades para aprender a hablar y lo hacen mucho más tarde de lo normal.
La escolarización, un momento clave
Cuando son bebés es muy difícil establecer con rotundidad si un niño sufre retraso mental, sobretodo si este es leve. Muchas de las cosas que hemos comentado hasta ahora se pueden deber a numerosos trastornos en el desarrollo; autismo, síndrome de asperger, dislexia, etc.
Es cuando empiezan su escolarización, empiezan a socializarse y a recibir sus primeras lecciones, que podemos evaluar con más razones si el niño tiene retraso mental. En la escuela presentan serias dificultades en el razonamiento lógico y en la resolución de problemas.
Síntomas de retraso mental en el comportamiento
De hecho, en la forma como contacta e interactúa con el resto de personas y con los otros niños, podemos apreciar algunas de las claves que nos permitan saber si nuestro hijo tiene retraso mental.
- Hay que prestar atención a como actúa ante las órdenes y las reglas, los niños con retardo no logran adaptarse a estas normas o presentan muchas dificultades. Su comportamiento es infantil permanentemente y no responde ante las órdenes.
- También puede apreciarse un desconocimiento acerca de las acciones y sus consecuencias, de las cuales no son conscientes. No comprenden la gravedad de realizar ciertas cosas.
- Obviamente, otro de los síntomas que nos alertan y que pueden ayudar a saber si mi hijo tiene retraso mental es su dificultad para entender las cosas. Cuando se les enseña algo nuevo lo olvidan y les cuesta retener la información.
- Una de las principales características de los niños pequeños es su curiosidad y ganas de entender todo lo que les rodea. Tocar, palpar, chupar, buscar, preguntar, para ellos todo es nuevo y todo les sorprende, cualquier cosa les inspira una curiosidad muy intensa que los padres deben ayudar a satisfacer. Si además de todo lo expuesto anteriormente tu hijo presenta falta de curiosidad ante situaciones desconocidas puede ser un síntoma que te alerte de un posible retraso mental.
Cuándo visitar al pediatra
Si estas preocupado, si quieres saber si tu hijo tiene retraso mental o sospechas de que pueda tener algún tipo de retraso en el desarrollo la opción más sensata es contactar rápidamente con un pediatra.
El podrá evaluar si su desarrollo se ajusta al que debería ser normal para su edad. Si el pediatra encuentra razones para dar validez a esa sospecha, es muy probable que derive el caso hacía el neuropediatra o un especialista en desarrollo para que evalúen el caso con más profundidad.
Si tu hijo ya es más grande, muy probablemente requerirá la consulta de un psicólogo.
Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.
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- Si sospechas que tu hijo puede tener retardo mental, acude a un médico especialista para un adecuado diagnostico.