Cómo curar un espolón con remedios caseros

Conocer las causas de los espolones en los talones te ayudará a prevenir malos hábitos que dañan tu salud corporal y favorecen la aparición de este problema óseo. Estas son las principales causas de un espolón en el pie:

• El sobrepeso es una de las primeras causas de este problema en el hueso calcáneo. Cuando las personas padecen sobrepeso, sobrecargan la presión en la zona de los talones y, por tanto, puede ser una de las causas de que aparezcan espolones. Una zona del cuerpo tan pequeña como el talón tiene que soportar un exceso de peso y, por tanto, es más susceptible a padecer condiciones como esta.
• No pisar bien al andar es otra de las razones más comunes de esta afección en el pie. Hay personas que caminan de costado o que no apoyan todo el pie cuando caminan y, por tanto, la presión y el peso del cuerpo se centra en una zona concreta de la planta en lugar de repartirse de forma homogénea. Por tanto, es importante llevar un calzado adecuado o el uso de unas plantillas que corrijan esta mala praxis a la hora de caminar.
• Tener pie cavo o pie plano.
• Pasar mucho tiempo de pie o caminar en exceso.
• Hacer deporte de alta intensidad.
• Utilizar un calzado inadecuado, lo cual conlleva pisar mal.

Es importante tener en cuenta que el espolón calcáneo es más común en determinados tipos de pacientes, por lo que ciertos grupos deben cuidarse al máximo para evitar su formación debido a la práctica deportiva. Por ello, será necesario que antes de realizar actividad física visites a un podólogo para recibir indicaciones si sufres de algunos de los factores de riesgo del espolón en el pie:

• Pie cavo.
• Ser supinador o pronador.
• Tener sobrepeso.
• Tener alguna lesión en el talón de Aquiles o los músculos de la pantorrilla.

Además, no olvides realizar un adecuado calentamiento antes de cualquier práctica deportiva, esto te ayudará a evitar lesiones, incluido el espolón.

A continuación, te explicamos cómo curar un espolón con remedios caseros, usando productos específicos para ello, como las férulas, y plantas y otros productos naturales que son fáciles de conseguir.

Uno de los tratamientos más comunes de los espolones es el uso de plantillas ortopédicas, que te ayudarán a disminuir el dolor y corregir la calcificación ósea. Este tipo específico de plantillas para espolón cuentan con una zona más blanda en el área del calcáneo para amortiguar la pisada y reducir el dolor en el talón.

Esta es la forma más sencilla de poder reducir el dolor de un espolón, ya que amortiguas la presión cuando caminas y, por tanto, consigues redistribuir mejor el impacto evitando que todo él recaiga sobre la zona afectada. Con las plantillas conseguimos descargar la zona y, por tanto, sentir más alivio de forma inmediata, además de permitirnos caminar sin inconvenientes.

Otra buena opción para tratar los espolones son las férulas nocturnas, con las que mantendremos extendido el pie y especialmente el conjunto de la fascia plantar. No es un tratamiento recomendado al inicio de los problemas en el hueso calcáneo, sino que siempre deberá estar supervisado por un fisioterapeuta o médico especialista. De este modo, podremos curar une problema en el pie, durante las horas de sueño sin apenas darnos cuenta.

Asimismo, será muy importante que reduzcas las actividades que suponen un sobreesfuerzo del pie y conllevan a una presión en el talón y, por lo tanto, en el espolón. De esta forma, se recomienda evitar la realización que causen mucho impacto en el hueso calcáneo o actividad física como puede ser correr.

Tienes que tener en cuenta que, cuanto menos uses esta zona del cuerpo, más rápido se te curará el espolón y, por tanto, antes recuperarás tu salud y bienestar. Por este motivo, es recomendable que reduzcas la actividad física y, en el caso de que trabajes de pie o realices ejercicio físico durante tu jornada laboral, intenta que el peso de tu cuerpo se distribuya en los dos pies para evitar sobrecargar uno de ellos. Así, es recomendable que bajes el ritmo de tu día a día y que reposes al máximo.

Cuando el espolón cursa con inflamación y dolor, colocar un poco de hielo en la zona del espolón en el pie es una buena forma de conseguir alivio y reducir la hinchazón.

1. Envuelve un cubito de hielo en un paño y aplícalo sobre el espolón.
2. Deja que actúe durante unos 10 o 15 minutos.
3. También puedes colocar una compresa helada directamente después de hacer actividades físicas o caminar mucho. Estas compresas están creadas especialmente con esta finalidad y podrás guardarlas en el frigorífico después de su uso.

Otro de los mejores remedios caseros para el espolón calcáneo es el vinagre de manzana. Este producto atrae el calcio, es antiinflamatorio y disminuye los dolores. Para utilizarlo, haz lo siguiente:

1. Vierte un poco de vinagre de manzana en una gasa.
2. Frota la zona afectada con la gasa durante unos segundos.
3. Si lo prefieres, también puedes agregar un chorro de vinagre de manzana a un recipiente con agua tibia y sumergir los pies en la mezcla durante unos cuantos minutos.

Como tratamiento natural para el espolón también destaca el jengibre. La razón es que esta raíz tiene propiedades antiinflamatorias y disminuye las molestias en el pie, gracias a que contiene gingeroles, porque ayudará a tratar la posible fascitis derivada del espolón y a desinflamar la zona de alrededor de este. Para preparar una cataplasma de jengibre para aliviar el espolón calcáneo sigue estas indicaciones:

1. Prepara una infusión de jengibre hirviendo 1 trozo de raíz en 1 vaso de agua.
2. Cuela la preparación.
3. Cuando se enfríe un poco, empapa una gasa en el té de jengibre y colócala sobre el talón afectado.
4. Deja actuar durante unos 15 minutos.

Continuando con el objetivo de curar un espolón con remedios caseros, debemos hablar de los aceites esenciales antiinflamatorios, analgésicos y relajantes. Son excelentes para masajear el talón dolorido y obtener un alivio mucho más inmediato.

1. Los mejores aceites para aliviar los espolones son el de árnica, clavo de olor, manzanilla o romero.
2. Elige uno de estos aceites y mézclalo con algún aceite vegetal, como el de oliva o el de almendras.
3. Masajea la zona afectada por el espolón aplicando el aceite hasta que veas que se ha absorbido por completo.

Realizar estiramientos también te ayudará en el tratamiento del espolón en el pie para, de este modo, reducir y tratar de eliminar el dolor. Existen ejercicios específicamente indicados para estos casos que podrás practicar tú mismo/a en casa, ayudándote de elementos cotidianos como pelotas de goma, toallas o apoyándote en una mesa, aunque existen pelotas específicas para este tipo de dolencias y ejercicios. A continuación, te descubrimos algunos de los mejores ejercicios para lidiar contra esta condición:

• Ejercicios con pelota: en cualquier tienda deportiva o en un podólogo, podrás encontrar una pelota de ejercicios especialmente pensadas para curar un espolón. Con estas pelotas podrás relajar los músculos además de conseguir una mejora circulatoria de la sangre. Para hacer el ejercicio tan solo deberás colocarla bajo tu pie y hacerla rodar desde la zona del talón hasta los dedos, sobre todo, céntrate en las zonas donde más dolor sufras para que la bola te haga un suave masaje que te ayudará a relajar la zona.
• Haz estiramientos en la zona del talón: para curar un espolón con remedios caseros también se recomienda que hagas estiramientos para relajar la zona al máximo. Para ello, puedes estirar las piernas y elevar los dedos, tirándolos hacia ti; de esta forma notarás cómo la planta se estira al máximo y cómo empiezas a sentir menos tensión. Para conocerlos en detalle, consulta nuestro artículo Cuáles son los mejores ejercicios para tratar un espolón calcáneo.

Además, también te recomendamos que te realices masajes en la zona a tratar para conseguir mejorar la condición y sentir alivio inmediato.

Es vital que utilices un calzado adecuado a tu tipo de pie y forma de pisar, por ejemplo, si eres pronador necesitarás un tipo de zapatos distinto al que necesita alguien con pies planos o bien un supinador.

Por ejemplo, en el caso de la pronación, un aplanamiento del arco del pie más allá de donde se "supone" que tiene que ir, es la causa más común del espolón en el talón. No se debe confundir con "pies planos". Los zapatos que llevas causan la pronación. Quítate los zapatos y dóblalos. No deben doblarse en el arco o el talón, sino sólo en la punta del pie. Si tus zapatos se doblan detrás de la bola de tu pie, cámbialos. Asegúrate de obtener calzado con buen soporte de arco y de apoyo en general. Consulta a tu podólogo para que te oriente cuál es el mejor calzado para ti.

Aunque, hayamos comentado las posibles causas de esta afección en el pie y qué grupos de personas son las más propensas por varios factores de riesgo, en unCOMO te recomendamos que si empiezas a padecer dolores en esta zona del cuerpo acudas a un especialista para que te haga un examen y pueda determinar qué es lo que te está produciendo dicho dolor.

Así, tan pronto como sientas alguno de los síntomas de un espolón en el pie, lo primero que deberás hacer será visitar a un médico o especialista para que te examine, confirme el diagnóstico y te recomiende el mejor tratamiento sobre cómo quitar un espolón. No esperes a que el dolor sea tan intenso que no te permita realizar actividades cotidianas, sino que deberás solicitar cita médica a las primeras molestias. Además, una vez empezado el tratamiento adecuado también deberás ir a las revisiones pertinentes y en caso de que veas cambios o empeores.

Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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