Cómo comer si tengo cirrosis

Cómo comer si tengo cirrosis

El abuso del alcohol o haber padecido una enfermedad como la hepatitis C pueden conllevar a la aparición de cirrosis, una enfermedad que puede hacer que el hígado deje de trabajar correctamente y no absorba los nutrientes de los alimentos que ingerimos ni sea capaz de eliminar todas las toxinas.

Si haces algunos cambios en tu dieta puedes ayudar a disminuir los síntomas de la cirrosis y disfrutar, así, de una vida más saludable. En unComo te mostramos cómo comer si tienes cirrosis para intentar mejorar el funcionamiento del hígado con cirrosis.

Come más fibra

Una dieta alta en fibra es esencial para las personas enfermas de cirrosis y es que estos alimentos contienen un gran aporte nutritivo a la vez que sus grasas son saludables. Si tomamos alimentos con fibra contribuimos a disfrutar de una alimentación equilibrada, algo básico para evitar la desnutrición, una de las consecuencias más comunes en los pacientes con cirrosis.

Alimentos como el plátano, los frutos secos, los cereales o las harinas integrales son indispensables en las pautas alimentarias de un paciente con cirrosis.

Una dieta sin sal

Cuando una persona tiene cirrosis la capacidad de depuración y filtración del hígado se ven disminuidas, por lo tanto, el riñón pasa a ser el encargado de suplir las funciones del hígado enfermo. Para facilitar que el riñón pueda filtrar nuestros alimentos, es importante eliminar la sal de nuestra dieta ya que la sal contribuye a la retención de líquidos y a la obstrucción de los conductos.

En lugar de sal, puedes saborear tus alimentos con otros condimentos como orégano, pimienta o limón; en este artículo te contamos cómo sustituir la sal al comer.

La miel de abeja

La miel de abejas es un ingrediente cuyas propiedades ayudan a estimular la capacidad depurativa del organismo; de hecho, la miel es uno de los ingredientes más aconsejados para la recuperación de personas con cirrosis así como para mitigar los efectos de una resaca. Por lo tanto si quieres saber cómo comer si tienes cirrosis, un ingrediente que no puede faltar en tu dieta es la miel de abejas.

Más verduras en tu dieta

Las hortalizas y las verduras son buenos aliados para disminuir los efectos de la cirrosis y es que son unos ingredientes que contribuyen a purificar este órgano. Su alto contenido en enzimas y sus propiedades antioxidantes hacen que el hígado elimine con mayor facilidad las sustancias tóxicas y las grasas acumuladas.

De entre todas las verduras que existen, las más beneficiosas para tu hígado son:

  • Alcachofas
  • Zanahorias
  • Brócoli y coliflor
  • Remolacha
  • Espinacas

En este artículo profundizamos sobre las verduras buenas para el hígado.

Las frutas

Las frutas también son alimentos buenos para la cirrosis puesto que contribuyen en la depuración y limpieza del hígado favoreciendo las funciones de conversión de los alimentos en energía y de regulación de los niveles de grasa; de entre todas las frutas que existen, las que destacan por encima de todas son los cítricos por ser depurativos naturales.

Otras frutas buenas para la cirrosis son:

  • Manzanas
  • Limón
  • Pomelo o toronja
  • Naranja

En este artículo te explicamos en profundidad las frutas para limpiar el hígado.

Menos carbohidratos

La grasa procedente de los carbohidratos pueden causar una disfunción hepática y hacer que se acumulen excesos de grasa en el hígado, por lo tanto, es recomendable disminuir el consumo de carbohidratos (sobre todo los refinados) en tu dieta para la cirrosis.

Si quieres consejos para el cuidado de tu hígado, en este artículo te informamos cómo cuidar el hígado para intentar reducir los síntomas de la cirrosis.

Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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