¿Qué pasa si bebo agua destilada? - Aquí tienes la respuesta

Para comenzar, debemos señalar lo más básico y más importante, respondiendo la siguiente pregunta: ¿qué hace el agua en nuestro organismo? Si no bebes agua tu organismo literalmente deja de funcionar correctamente. Más de la mitad del cuerpo humano está compuesto por agua y en nuestro organismo esta forma parte de muchos procesos; por ejemplo, la sangre se compone de agua y esta, a su vez, se encarga de llevar el oxígeno a las células, sin oxígeno todas esas células morirían y el cuerpo cesaría de funcionar.

El agua puede ser encontrada en un fluido que forma parte del sistema inmunológico, llamado linfa, este fluido participa en la defensa del organismo ante enfermedades. Por otra parte, el agua puede ser encontrada en los jugos digestivos, importantes dentro de los procesos alimenticios, también se encuentra en la orina y en la heces, participando de esta forma de los procesos de liberación de desechos.

En verano, o cada vez que realizas alguna actividad que requiera de esfuerzo, lo primero que no puedes dejar de notar es que comienzas a transpirar. El sudor, es la reacción del cuerpo para regular las altas temperaturas, las cuales, si no transpirásemos dañarían nuestros órganos internos, además de provocar un colapso en todo nuestro organismo.

Por todas estas razones, es muy importante mantenerse siempre bien hidratado asegurando así el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo.

En este otro artículo te descubrimos todos los beneficios de beber agua.

Comprendida la importancia del agua en nuestro organismo, surge la siguiente pregunta ¿qué pasa si bebo agua destilada? Todos tenemos aprendida la famosa formula H2O, la cual describe los componentes del agua (2 átomos de hidrogeno enlazados a 1 de oxígeno) pero es importante comprender que el agua común y corriente que bebemos no se compone solo de estos elementos, sino que también tiene otros elementos disueltos en su composición: sales minerales (como cloruro de sodio, es decir, sal común), cloro (presente en el agua de la mayoría de los grifos) y sales de flúor, entre otros.

El agua destilada por su parte, no presenta ninguno de estos otros elementos, sino que es puramente H2O, sin ningún otro agregado. Así pues, el agua destilada no causa mayor efecto negativo que el agua común.

En este sentido, es importante comprender cómo se comporta el agua en nuestro organismo. Cuando tenemos dos disoluciones acuosas separadas por una membrana permeable (como la de las células), el agua puede pasar a través de esta membrana mediante un proceso llamado osmosis. Si el agua que se encuentra en uno de los lados de la membrana cuenta con una mayor concentración de sales, que el otro, el agua pasará del lado con menor concentración hacia el de mayor, buscando igualar las concentraciones.

Los fluidos corporales que tenemos en nuestro organismo cuentan con una determinada concentración de sales minerales (9 gramos por litro) y una disolución acuosa que tenga la misma concentración se denomina como isotónica. Por otra parte, una solución acuosa con mayor concentración se llama hipertónica y por el contrario, si la disolución cuenta con una concentración menor, se llama hipotónica.

Una de las creencias erróneas asociadas al agua destilada es que, al ser una solución muy hipotónica, nuestras células, por medio del proceso de osmosis, absorberían esta agua hinchándose y dañando los tejidos. Pero esto resulta ser falso y para explicarlo es necesario saber cuál es la concentración de sales en el agua considerada “normal”.

El agua destilada tiene un una concentración de sales minerales de 0 gramos por litro, es decir, el agua destilada tiene una diferencia con la concentración de sales de nuestro cuerpo de 9 gramos, mientras que el agua “normal” vendida para ser consumida, tiene una diferencia con la concentración de sales de nuestro cuerpo de 8,95 gramos.

Comprendiendo estos valores, y notando la mínima diferencia entre el agua destilada y el agua de consumo normal, podemos concluir que el agua destilada no causa ninguna afección.

El agua que bebemos normalmente no es destilada, pero por su baja concentración de sales, podemos afirmar que es casi destilada. Por tanto, beber demasiada agua destilada tiene los mismos efectos que beber agua normal en exceso. Es decir, se disminuye los niveles de sales en el organismo y esto puede resultar peligroso.

Las sales minerales en nuestro organismo participan en funciones estructurales, además de ocuparse de regular el pH (potencial hidrógeno) de nuestro organismo, nivelar la presión osmótica y llevar adelante varias reacciones bioquímicas en nuestro cuerpo.

Cuando sufrimos deshidratación o disminución de las sales minerales, podemos sufrir varias afecciones como: fatiga, mareos, dolores de cabeza, náuseas, problemas musculares y también de insuficiencia cardíaca.

Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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Consejos

• Recuerda siempre estar bien hidratado, llevando siempre contigo una botella de agua y consumiendo este importante líquido con regularidad.
• Una forma clara de detectar una deshidratación y la falta de sales minerales, es por medio de la orina, una orina normal, debe ser clara, casi transparente, mientras que al sufrir deshidratación la orina se torna más oscura y amarillenta. Ante este último caso, es mejor consultar con un médico especializado.