Cómo quitar la tos nerviosa

La tos nerviosa, a diferencia de otro tipos de tos, no es consecuencia de una afección o enfermedad determinada, sino que tiene su origen en algún tipo de problema que afecta al sistema nervioso. Los factores que se establecen como causas comunes de tos nerviosa son pasar por un estado de estrés o nerviosismo, tener ansiedad o sufrir un trauma de carácter emocional.

Sus síntomas son fáciles de identificar, pero es importante que sepas de qué forma se manifiesta y cuáles son sus características para saber si realmente se trata de tos nerviosa o no:

• Es una tos seca que puede aparecer y desaparecer de manera repentina.
• No aparece acompañada de mucosidad.
• No se presenta junto a otros síntomas respiratorios, como falta de aire o sibilancias, ni extra respiratorios, como fiebre, debilidad, falta de apetito, etc.
• Suele aparecer en aquellos periodos en los que la persona tiene estrés, está nerviosa, atraviesa situaciones complicadas, está angustiada, etc., y cesa en periodos en los que se encuentra completamente relajada, como por ejemplo cuando está de vacaciones y está alejada de cualquier circunstancia que le provoque ansiedad.
• Se presenta con muchísima más frecuencia durante la noche y puede ser persistente en algunos momentos clave del día.
• Causa irritación en las vías respiratorias.

A pesar de esto, debes tener en cuenta que es fundamental acudir al médico si presentas un tos persistente que no cesa, pues siempre es necesario un diagnóstico seguro que determine la causa exacta del problema y descarte el padecimiento de afecciones o patologías de mayor gravedad.

La tos nerviosa es una respuesta del organismo frente a un sentimiento o emoción que se está reprimiendo, por lo que es importante prestarle atención e iniciar el tratamiento adecuado en cada caso. Primero será necesario identificar el factor psicológico causante, ya sea el estrés, la ansiedad, el nerviosismo, un reciente trauma emocional, etc., y para ello puede requerirse la intervención de un psicoterapeuta que ayuden al paciente a exteriorizar y expresar sus emociones con el fin de llegar a la base del problema.

Además de la medicación adecuada, si es necesaria, para ayudar a calmar la tos, como pueden fármacos antitusígenos, corticoides inhalados, pastillas para chupar, etc., el médico también puede recetarte medicamentos para tratar la ansiedad que esté detrás de la tos nerviosa y favorecer tu relajación. Así mismo, deberás aprender a relajarte física y mentalmente y contribuir a tu bienestar para combatir la tos nerviosa; para esto, pueden ser muy beneficiosas medidas y prácticas como las siguientes:

• Técnicas de respiración: aprender a respirar bien es básico tanto para deshacerse de las tensiones acumuladas como para mejorar la capacidad torácica y hacer una correcta absorción del oxígeno.
• Ejercicios de relajación: puedes poner en práctica los ejercicios de relajación para dormir bien que te mostramos en este artículo, pues te ayudarán a conciliar el sueño, combatir el estrés y mejorar la oxigenación de la sangre.
• Meditación u otras terapias: la meditación es una práctica mediante la cual se consigue un estado de concentración profundo que relaja la mente y favorece la eliminación de tensiones y emociones negativas. Además de esta, también son buenas disciplinas como el yoga o el pilates.
• Actividad física: cuando se realiza ejercicio físico, se liberan endorfinas que son unas hormonas que favorecen un estado de ánimo óptimo y la sensación de bienestar y felicidad. Es por ello que practicar actividad física de forma regular o hacer un deporte que te guste es también una buena opción para conseguir relajarte y, por consiguiente, aliviar la tos nerviosa.

Además de todo lo anterior, en muchas ocasiones los remedios naturales son los mejores aliados para quitar la tos nerviosa y ayudar al cuerpo a alcanzar un estado de relajación profunda y mantener controlados los niveles de estrés y ansiedad. Los tratamientos caseros que pueden dar buenos resultados son los siguientes:

• Malva: calma la irritación que puede provocar la tos nerviosa en las vías respiratorias y, al mismo tiempo, suaviza las cuerdas vocales. Te aconsejamos tomar una infusión de malva por la noche, que es cuando tiende a acentuarse este síntoma.
• Pasiflora: además de que facilita el paso del aire por los bronquios, la pasiflora cuenta con propiedades relajantes y sedantes muy potentes. Puedes consumirla a modo de infusión, en extracto líquido o cápsulas, descubre todos los detalles en el artículo Cómo tomar pasiflora.
• Tomillo: es uno de los antitusivos naturales más empleados en caso de tos irritativa e infecciones de pecho y garganta. Prepara una infusión de tomillo agregando 2 cucharadas de este en una taza de agua hirviendo y, cuando esté preparada, cuela y añade una pequeña cucharada de miel.
• Vahos de eucalipto: los vahos son ideales para desbloquear las vías respiratorias y calmar las irritaciones causadas por la tos. Hierve unas cuantas hojas de eucalipto en 1/2 litro de agua y, una vez lo retires del fuego y te asegures de que no quema, coloca la olla en una superficie plana y acerca tu nariz a esta para empezar a inhalar los vapores que se desprenden.

Descubre más remedios como estos en el artículo Cómo tratar la tos con remedios caseros.

Este artículo es meramente informativo, en unCOMO no tenemos facultad para recetar ningún tratamiento médico ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a acudir a un médico en el caso de presentar cualquier tipo de condición o malestar.

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